Desde que China alcanzo la situación de segunda economía mas grande del mundo en el 2010 pasando a Japón su influencia en el mundo ha aumentado. Especialmente desde que Xi Jinping se convierte en Presidente China ha visto incrementar su presencia en el escenario internacional a través de eventos como la realización de la cumbre APEC del 2014, la creación del Banco Asiático de Inversión en Infraestructura y el nuevo Banco de Desarrollo de los BRICS, donde China incrementa su rol en el sistema financiero internacional, y a través de iniciativas como la “nueva Ruta de la Seda” que integraría Europa con Asia, así como de “One belt, one road” (ver mapa abajo) por el cual China trata de construir una infraestructura a nivel global.
Fuente: link (accedido el 24-9-2015)
China como una gran potencia económica tiene también ahora una gran responsabilidad. Por ejemplo el año pasado en noviembre alcanzo con EE.UU. un acuerdo sobre el cambio climático para reducir las emisiones de gases que causan el efecto invernadero . Como son los dos mayores emisores de estos gases este acuerdo es importante para todo el mundo.
Por ultimo la visita del Presidente Xi Jinping a EE.UU. pone a China otra vez en el escenario internacional, pues las dos economías, que juntas explican casi un tercio de la economía mundial, tienen una responsabilidad mayor en esta época de incertidumbre por la desaceleracion de la economía mundial y frente a una Europa que crece muy poco.
China actualmente es el mayor socio comercial de 124 países del mundo, más de la mitad, y esta influencia seguirá aumentado .
China creció casi 10% promedio anual desde 1979 cuando comienza sus reformas hasta el 2011, unos 33 años de alto crecimiento consecutivo. Pero desde el 2102 esa tasa ha bajado a 7.5% y ahora a 7% y es probable baje algo más. Como dicen los chinos se está ingresando a una nueva normalidad de crecimiento menor. Pero esto era inevitable pues por un lado ese alto crecimiento se sustento en la existencia de una mano de obra barata, que en China ya se termina, y por otro lado en altas tasas de inversiones y crecientes exportaciones, y estos dos últimos factores ya no son sostenibles tampoco. El crecimiento de China ahora se sustentara en un mayor consumo interno, pues su población ha mejorado bastante su nivel de vida y de ingresos tras muchos años de alto crecimiento económico. También el motor de la economía será ya no tanto la industria sino los servicios.
Entonces el mundo se tiene que acostumbrar a menores tasas de crecimiento económico chino, pero esto último no significa que el impacto de China en el mundo será menor. China crecía 10% al año cuando su economía era de un menor tamaño de la actual. Por ejemplo hace 10 años el tamaño de su economía era de 5 billones de dólares (25 veces el tamaño de la economía del Perú el 2014 que fue de 200 mil millones de dólares). Al crecer 10% al año cada año su economía aumentaba entonces unos 500 mil millones de dólares. Ahora el tamaño de la economía china es de más de 10 billones de dólares. Aunque crezca 5% al año, un crecimiento de 5% en una economía de 10 billones de dólares representa un adicional de 500 mil millones de dólares. Entonces China seguirá creciendo y su impacto en el mundo será mayor pues su tamaño será mayor. Quizás su demanda cambie. Ahora el 53% de los chinos viven en las ciudades y demandan alimentos y mejores servicios, Esta demanda es la que hay que satisfacer. Aparte de la demanda su creciente clase media que tiene.
China debería seguir reformando su economía para hacerla más competitiva. Producir cada vez productos con más valor agregado, más avanzado tecnológicamente. Menor inversión pero en sectores de avanzada tecnología, con menos contaminación. Y aquí China tiene tecnologías, como paneles solares, baterías eléctricas, que puede contribuir también a disminuir la contaminación en el mundo.
China debe fortalecer su mercado interno, disminuir las diferencias regionales de ingresos entre la parte costera y la del interior del país, y así alcanzar un crecimiento económico más sostenido y equitativo.
Otro tema es que China tiene muchas reservas internacionales, unos 3.65 billones de dólares, pero casi un tercio, 1.15 billones esta en bonos del tesoro de EE.UU. que pagan poca tasa de interés (aunque son los más seguros). Debería usar parte de ese dinero en financiar el desarrollo de otros países, como en la infraestructura, y en este sentido el Banco Asiático de Inversión en Infraestructura y el nuevo Banco de Desarrollo de los BRICS son buenas iniciativas.
También China debería tratar de enseñar a los países en desarrollo su experiencia de cómo ha podido hacer para pasar en poco tiempo de producir bienes con poco valor agregado a cada vez productos más sofisticados.
China también debería poco a poco liberalizar más su mercado a la competencia externa, para que sus empresas sean más competitivas y así hacer que otros países vendan más a China también y los consumidores chinos puedan tener acceso a productos más baratos y de mejor calidad. En general poco a poco China debe dejar que el mercado decida más y las empresas privadas, nacionales y extranjeras, tengan mayor presencia en la economía (como en general ya lo está haciendo China hasta ahora).
En todo caso un crecimiento a una tasa menor pero sostenida hará que China siga siendo un motor de la economía mundial.
China es la segunda economía más grande del mundo y uno de los motores de la economía mundial. De hecho fue el principal motor del crecimiento en los últimos años. Además China es el principal comprador de muchas materias primas (ver Gráficos abajo). Por eso la desaceleración de su economía China influye, primero, pues su menor demanda por materias primas ha disminuido el precio de estas lo que afecta a Latinoamérica especialmente, que exporta mayormente materias primas; segundo, la devaluación de su moneda, que fue bastante pequeña en verdad, añadió volatilidad a las fluctuaciones del tipo de cambio y a mayores devaluaciones de las monedas latinoamericanas; y tercero, la caída en el precio de las acciones de su Bolsa de Valores igualmente añadió volatilidad a las Bolsas de Valores en el mundo. El temor es que la desaceleración de la economía china sea mayor a la que el gobierno admite. Otro temor es que ante la desaceleración del crecimiento chino y la capacidad instalada sobrante de muchas de sus fábricas, los productos de esas fábricas puedan salir a bajos precios al resto del mundo y ocasionar mayor competencia (temor que se haría mayor si China devalúa más su moneda).
China es el mayor consumidor de varias de las materias primas en el mundo.