El Perú tendrá sembradas unas 30, 000 hectáreas de berries, o frutos del bosque, en las zonas alto andinas del Perú para el 2021, beneficiándose alrededor de 20, 000 pequeños agricultores, proyectó el presidente de Sierra Exportadora, Alfonso Velásquez.
Los arándanos son los berries cuya producción y exportación está llevando ventaja en el Perú, pese a ser los que requieren una mayor inversión.
Se espera cerrar este año con 2, 500 hectáreas sembradas y US$ 70 millones en exportaciones. Las principales empresas exportadoras de este fruto son Campo Sol (con 1, 500 hectáreas) y Talsa (con 500 hectáreas).
La producción de arándanos requiere una inversión inicial de aproximadamente US$ 45, 000, y el retorno se logra en tres o cuatro años por montos aproximados de US$ 120 mil, ya que su precio internacional es alto (US$ 15 el kilo) justamente en la etapa del año en que el Perú produce y exporta.
A los arándanos le sigue, aunque con bastante margen, el aguaymanto, berrie andino cuya exportación para el 2015 se proyecta en alrededor de US$ 2 millones. En el 2010 se exportaron solo por US$ 160 mil. El aguaymanto es el berry que requiere menos inversión (alrededor de US$ 3, 000) y la rentabilidad es de US$ 6, 000 aproximadamente, en solo un año.
El interés también recae en la frambuesa, cuyo cultivo está orientado a las pequeñas parcelas con mano de obra tradicional. Empresas agrícolas de Cajamarca y Lambayeque están trabajando en la producción de esta fruta, cuya inversión inicial es de aproximadamente US$ 15, 000 y el retorno, que se calcula en US$ 45, 000, se hace efectivo a partir del cuarto o quinto año.
La cereza, que no es un berry, se plantea como un cultivo a largo plazo, pero ya está en la agenda de los productores sobre todo de la sierra, ya que este fruto requiere de climas fríos.
El Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) ya concluyó el Análisis de Riego de Plagas y ha aprobado el reglamento para la introducción de patrones más comerciales a fin de potenciar este cultivo en el país.
Sierra Exportadora implementó hace un año la primera parcela demostrativa de cerezas en Huarochirí, con patrones adaptados al Perú e injertos variados. Ahora se está pendiente de la evolución de este proyecto.
El costo de inversión para la cereza es mucho menor que el del arándano (entre US$ 8, 000 y US$ 10, 000 por hectárea); sin embargo, el retorno es parecido (alrededor de US$ 120 mil) entre el quinto a séptimo año, aunque se espera que en el Perú este periodo sea menor que en Chile.
El Perú tiene la gran ventaja de aprovechar la contra estación respecto a los productores de berries del hemisferio norte. Por eso, lograría ventas a precios pico entre los meses de setiembre y noviembre. Incluso, podría adelantar envíos a Chile que por ahora concentra el 90% de las exportaciones de arándanos y cerezas en el hemisferio sur.
En esta temporada, los arándanos pueden costar entre US$ 14 y US$ 17 el kilo. La frambuesa entre US$ 10 y US$ 12 y la cereza entre US$ 20 y US$ 25 el kilo. El precio del aguaymanto fluctúa entre los US$ 6 y US$ 7 (fresco) y deshidratado entre los US$ 10 y US$ 12.
En cuanto a la inversión en berries, ella proviene en primer orden del sector privado, pero también hay interés de parte de los gobiernos regionales y locales por realizar proyectos a favor de sus comunidades, a través de Proyectos de Inversión Pública (PIP) que Sierra Exportadora desarrolla enfocados en estas producciones.
Un caso ejemplar es el de la región Apurímac, donde se han plantado 5, 000 plantas de arándanos, gracias a un PIP articulado entre Sierra Exportadora y ese gobierno regional, en beneficio de la Asociación de Productores Agropecuarios de Yaca, distrito de Circa, que integran 37 socios y productores.
También destaca el proyecto que Sierra Exportadora desarrolla en Ancash con el apoyo de las empresa minera Lincuna, la cual ha invertido S/. 1.3 millones para la producción de arándanos en el distrito de Coris, provincia de Aija, proyecto que beneficia a 72 familias de la comunidad Nuevo Amanecer.
Sierra Exportadora organizó los días 12 y 13 de noviembre el V Seminario Internacional de Berries, al cual asistieron alrededor de 500 productores, entre pequeños y medianos, de todo el país, además de investigadores, funcionarios públicos y exportadores relacionados con este sector.