Perú: las exportaciones pesqueras y los ingresos del Estado

Alabar las exportaciones pesqueras peruanas magnificando el hecho de que somos los primeros en harina de pescado y pota es una visión parcial del tema. Al analizar las cifras de recaudación del impuesto a la renta de tercera categoría y de la devolución de impuestos al sector, tomadas de la Nota Tributaria que publica la SUNAT, podemos ver el panorama completo.

En el link al que hace referencia esta nota, se muestra por separado los tributos administrados por la Sunat y parte de los recursos directamente recaudados por el Ministerio de la Producción como los derechos de pesca.

Para el curioso lector no versado en temas tributarios, le podría surgir la duda, la inquietud o la pregunta de cómo entender que al sector Pesca se le devuelve impuestos pagados en mayor proporción que los recaudados. En un periodo de 15 años ha devuelto la suma de 8.589’00,000 soles y cobrado por impuesto a la renta la suma de 2.201’000,000 de soles.

Del total de recaudación de renta de tercera categoría del país, el aporte del sector pesquero es del 0,66%

Existen muchas demandas sectoriales por inversión en infraestructura, por más investigación, por mayor control y fiscalización, por más acciones en desarrollo tecnológico, y por incentivos para la propia industria y la acuicultura. Todas legítimas y razonables desde el punto de vista del administrado, es decir del empresario, sea grande o pequeño.

La pregunta es ¿con qué dinero? o ¿cuál sería la fuente de financiamiento para atender estas demandas?

Los cuadros muestran las cantidades que el fisco ha devuelto al sector pesquero desde el año 2001. No hay registros anteriores en la Nota Tributaria. En el mismo se aprecia cuánto ha recibido la pesca tradicional, es decir la industria de harina de pescado y cuánto ha recibido la industria de congelados, conservas y curados.

Un nuevo enfoque debe contemplar una participación del Estado en la renta pesquera más justa, en la medida que representa a los ciudadanos propietarios del recurso natural.

Los desembarques provenientes de la pesca artesanal no están obligados al pago de derechos de pesca. Casi la totalidad de desembarques para CHD provienen de la pesca artesanal. Si además el vendedor del producto pesquero es informal, o sea que no paga renta ni IGV (porque la venta de pescado fresco está exonerada), estamos ante una situación discriminatoria e injusta.

La pesca industrial paga derechos de pesca diferenciados por especie y muy bajos, dentro del ordenamiento legal vigente. Que sea legal, no significa necesariamente que sea lo debido.

Cuando se ve, desde esta perspectiva y bajo un enfoque de renta y del ciudadano, que todos los desembarques para consumo humano directo, o sea casi 13 millones de toneladas en los últimos 12 años, no han pagado derechos de pesca porque la norma así lo permite, surge  la necesidad de replantear el enfoque de la pesca desde una perspectiva ciudadana no pesquera. Porque el recurso natural no es propiedad de los pesqueros, sino de todos los peruanos.

El hecho es que un grupo de ciudadanos extrae nuestros peces del mar a precio muy barato y otro grupo lo hace gratis.

La columna del cuadro de transferencias de canon pesquero x impuesto a la renta, no constituye un ingreso adicional de renta sino que represente el 50% de la recaudación del impuesto a la renta de tercera categoría de acuerdo a la norma vigente.

Lo destacable del cuadro es la cifra de derechos de pesca, (que son recursos directamente recaudados por el Ministerio de la Producción) que en el período del 2003 (fecha de creación del canon pesquero) al 2015 ha producido 305’293,405 soles que han sido transferidos a los gobiernos locales y regionales.

En relación a la sumatoria de la recaudación por derechos de pesca e impuesto a la renta, podemos decir que son recursos escasos en relación a la demanda de inversión que existe y/o que podría hacerse; o que son recursos injustos en proporción a la renta de la industria; o que podrían ser mayores si la informalidad del sector artesanal se redujese.

Pero más allá de ello, la ironía es que, bien sean escasos o suficientes, no se gastan con eficacia, lo que pone en duda la necesidad de contar con mayores recursos para inversión y que constituye un argumento legítimo de queja del administrado que bien puede decir que no hay necesidad de más dinero para el fisco porque siempre sobra dinero, como puede apreciarse en los cuadros-

La nota completa con los cuadros estadísticos en:

http://elmarabierto.blogspot.pe/2016/02/los-ingresos-del-estado-peruano.html