El Gobierno está elaborando un plan de vivienda y un programa de inversiones en agua potable y saneamiento en el marco del proceso de reconstrucción. Es urgente concluirlos pues, el Niño Costero ha dejado a miles de familias norteñas sin viviendas o en casas transitorias. Por otro lado, los efectos de dicho fenómeno, aunado a los problemas de la constructora brasileña Odebrecht tienen un costo económico para el país de entre 0,5% y 1% del Producto Bruto Interno (PBI).