Donald Trump anunció su plan para restringir las inversiones chinas en empresas de tecnología estadounidense. Este anunció tuvo como finalidad combatir el robo de la propiedad intelectual. Por ello, Donald Trump ordenó al departamento del tesoro realizar una investigación sobre las adquisiciones de los activos que se importaron en el país norteamericano por parte de los inversores foráneos, con la finalidad de tomar las medidas necesarias para evitarlo.
Para lograr el objetivo, el presidente añadió que se necesita una modernización de la legislación existente (versión mejorada de la Ley de Modernización de la Revisión del Riesgo de Inversión Extranjera -FIRRMA- por sus siglas en inglés) para mejorar la protección de Estados Unidos ante las nuevas amenazas derivadas de la inversión extranjera.