Según la Asociación de AFP siete de cada diez trabajadores no recibirían una pensión en el Perú, debido al alto porcentaje de informalidad laboral existente, el cual no garantiza el beneficio de la seguridad social en el país. De los más de 16 millones de personas que trabajan, alrededor de 12 millones son informales, por lo que no tienen el beneficio de la seguridad social. Esta situación se agravaría porque entre marzo y mayo la población ocupada disminuyó 47,6%, lo que significa que más de 2 millones de personas perdieron su empleo como consecuencia de la cuarentena y paralización de actividades por el COVID-19.
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