El último informe de la BEA (Oficina de Análisis Económico), indicó que la economía de EE. UU. mostró un retroceso de 0,4% en los primeros meses del año debido al repunte de casos de covid-19 que se registró a inicios del 2022 y el incremento de la inflación. Este resultado económico negativo es el primero en registrarse desde mediados del 2020. Entre los factores que llevaron a la contracción estuvieron la disminución en la inversión en inventarios y la reducción de las exportaciones, un reflejo de los persistentes problemas en las cadenas de suministro globales y las alteraciones provocadas por la invasión rusa de Ucrania. Asimismo, el informe hizo hincapié en la expiración de la mayoría de los programas de estímulo fiscal lanzados por el Gobierno federal para apoyar a las familias y negocios ante el impacto de la pandemia. Por otro lado, el único elemento positivo que muestra la economía de EE. UU. es la solidez del gasto de los consumidores, que creció 2,7 %. en el primer trimestre.
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