Dr. Paul Farmer (1959-2022), médico y humanista

Cómo no escribir unas palabras en homenaje a este gran médico, natural de los EEUU, a su inagotable trabajo con los más pobres entre los pobres, en países azotados por la enfermedad. Un estudioso, investigador e innovador de la salud pública global. Una humanidad desbordante como pocas, una vida dedicada a los demás. Un ejemplar ser humano, un héroe de nuestro tiempo. Paz en su descanso eterno y consuelo a sus seres queridos.

Paul Edward Farmer (1959-2022) fue un médico y antropólogo estadounidense, profesor universitario y presidente del Departamento de Salud Global y Medicina Social de la Facultad de Medicina de Harvard. El Dr Farmer nació en North Adams, Massachusetts, EE. UU y falleció inesperadamente el 21 de febrero de 2022 en Burera, Ruanda, África oriental.

Paul Farmer fue nombrado profesor universitario, la distinción más alta de Harvard para un miembro de la facultad. Como relievó Drew Faust, la primera mujer que preside esa universidad: ‘Paul Farmer es mejor conocido por el público como un humanitario pionero. Pero igualmente por sus escritos, que han traspasado las fronteras entre las ciencias sociales y la investigación biomédica y casado la teoría y la práctica para forjar un nuevo enfoque de la salud mundial». También investigó las estrategias comunitarias para combatir las enfermedades infecciosas, salud y derechos humanos, y el papel de las desigualdades sociales en la distribución y resultados de las enfermedades.

“Habiendo construido mi carrera académica en torno a la convicción de que podemos tomar los frutos del descubrimiento científico en medicina y salud pública para mejorar la vida de las personas marginadas por la pobreza y otras fuerzas más allá de su control, estoy profundamente agradecido con Harvard”, dijo el médico, quien añadió las gracias también por la oportunidad de mostrar cómo la erudición y la enseñanza pueden tener un impacto profundo fuera del aula. Farmer recibió su educación universitaria en la Universidad de Duke antes de obtener doctorados en medicina y antropología por Harvard.

El médico estadounidense es mundialmente conocido como cofundador de Partners In Health (PIH), organización humanitaria internacional que trabaja en cooperación con las comunidades para combatir enfermedades en entornos de escasos recursos. Con el equipo de PIH, Farmer lideró la movilización de esfuerzos de socorro tras desastres como el terremoto de Haití y estrategias comunitarias para tratar el SIDA y la tuberculosis resistente a los medicamentos entre las poblaciones que viven en pobreza extrema. Ha estado involucrado en la construcción o renovación de docenas de hospitales y clínicas en América Latina y África, y ha capacitado a cientos de médicos en Harvard y de todo el mundo.

Su investigación en la intersección de la antropología médica, la salud pública y la medicina clínica ha sido la piedra angular del esfuerzo por relacionar la teoría con la práctica efectiva en la salud global. Su trabajo es reconocido por sus contribuciones esenciales a la etnografía, la antropología de la enfermedad epidémica, la teoría de la violencia estructural y los estudios empíricos de los derechos humanos en el ámbito de la salud.

Paul Farmer como antropólogo médico y médico de salud global dedicó su vida a la atención médica en algunos de los países menos favorecidos del mundo. Fue rector de la Universidad de Equidad en Salud Global (UGHE) en Ruanda, una institución académica modelo elogiada por UNESCO. “Paul dedicó su vida a mejorar la salud humana y abogar por la equidad en la salud y la justicia social a escala mundial”, dijo el decano Daley de la Escuela de Medicina de Harvard (EMH). “Para algunos, Paul representaba el corazón y el alma de la EMH”.

Según Sheila Davis de PIH la visión del mundo del Dr. Farmer vivirá a través de la organización benéfica de la que fue cofundador. “Paul enseñó a todos los que lo rodeaban el poder del acompañamiento, el amor mutuo y la solidaridad”. Farmer trabajó de la mano con gobiernos locales y organizaciones de todo el mundo, incluidos los de comunidades rurales desatendidas, para establecer asociaciones para ayudar a construir hospitales, capacitar a trabajadores médicos y establecer clínicas comunitarias en áreas remotas y empobrecidas donde sus residentes habrían tenido pocas esperanzas de recibir atención médica.

Fue a Haití, trabajó allí por primera vez como voluntario cuando aún era estudiante universitario, y dedicó a ese país gran parte de su vida: ayudó a agricultores desposeídos en la Meseta Central donde quedó impresionado por el nivel de atención a los residentes empobrecidos. Allí, se desempeñó durante diez años como director médico de L’Hôpital Bon Sauveur, un hospital de caridad. Bajo el liderazgo de Farmer, PIH construyó un hospital luego del terremoto de 2010, luchó contra la tuberculosis multirresistente en Perú y en todo el mundo, ayudó a Liberia y Sierra Leona a combatir el ébola y trabajó para detener el virus Zika.

El trabajo de Farmer se ha convertido en un modelo para la prestación de atención médica en comunidades de escasos recursos en todo el mundo. Así sentó las bases para el desarrollo de la ciencia de la implementación de servicios de salud global. La escritora Tracy Kidder describió en su libro, ‘Mountains Beyond Mountains: One doctor’s quest to heal the world’ (Montañas más allá de montañas: un médico en busca de curar al mundo) describió, entre otras cosas, la forma en que el Dr. Farmer exportó el tratamiento para la tuberculosis multirresistente de Haití a Perú y luego a Siberia, logrando tasas de curación comparables a las de los EE.UU.

El Dr. Farmer creció en Florida con sus padres y cinco hermanos, viviendo austeramente. Le sobreviven su esposa, Didi Bertrand Farmer, y sus tres hijos.

Fuente. ‘In Memoriam: Paul Farmer’. https://hms.harvard.edu/news/memoriam-paul-farmer, Partners In Health y otros recursos en Internet.