El alza del precio de los combustibles ha elevado los costos operativos del transporte entre 30% y 45% provocando que los pasajes interprovinciales suban entre 15% y 20%. Esta situación también afecta a los transportistas de carga y al transporte interprovincial que además enfrentan la competencia desleal de las unidades informales. En este contexto, los transportistas de carga ya anunciaron un paro para el 4 de julio. Ante este escenario, el ejecutivo debe tomar medidas que atenúen el incremento de los costos. Se podría considerar una reducción de la tasa de impuesto a la renta o incluso del IGV, así como ampliar los plazos de fraccionamiento y descuentos a multas, medidas que también apoyarían la recuperación del turismo interno. Debe notarse que las empresas formales enfrentan altas cargas operativas como el pago de un terminal, sueldos y los peajes, incrementando los gastos operativos, informó El Consejo Nacional de Transporte Terrestre.
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