El crecimiento desestacionalizado resultó ser la tasa de crecimiento entre trimestres más fuerte en tres períodos. El gasto de los hogares fue el principal impulsor de la expansión (1,3%), alentado por la flexibilización de las restricciones por Covid-19 y la temporada turística de verano, especialmente en los países del sur.
Asimismo, el gasto público aumentó 0,6% y la formación bruta de capital fijo lo hizo en 0,9%. Por su parte, la contribución del comercio exterior fue negativa, ya que las exportaciones aumentaron 1,3% y las importaciones 1,8%. En comparación con el mismo trimestre del año pasado, el PBI de la Zona Euro creció 4,1%.