La semana pasada el BCRP de manera indirecta pronosticó que el programa Impuso Perú del MEF no tendría un impacto considerable en el crecimiento de la inversión pública, incluso consideró que lo más probable es que caiga. Esta situación enfureció a los funcionarios del MEF que no dejaron pasar la oportunidad para discrepar de las declaraciones del ente emisor.
Ayer el MEF, avivando el enfrentamiento, le lanzó una pulla al BCRP al considerar que la inflación no volverá a la meta de política monetaria en 2023, en contraposición con lo que piensa el BCRP. Esta situación, que más parece una “lucha de egos”, nos preocupa mucho puesto que pone en tela de juicio la posibilidad de tener una adecuada articulación entre políticas fiscal y monetaria.