El Ministerio de Pesquería

La oferta presidencial de crear un Ministerio de Pesquería ha despertado una serie de expectativas y unas cuantas críticas también.

Más allá de eso, y antes de enfrascarnos en debatir las conveniencias o inconveniencias de la creación de este Ministerio, deberíamos preguntarnos si esto es posible, o no lo es.

Una entidad de esta naturaleza no se puede crear solamente por decisión del Ejecutivo. Requiere de una ley, por tanto, tiene que ser aprobada por el Congreso.

En este escenario, recordemos que a comienzos de este gobierno se remitió al Congreso el proyecto de ley que crea el Ministerio de Ciencia y Tecnología, que fue una oferta electoral durante la campaña. A quince meses de iniciado este mandato, dicho proyecto ni siquiera está en la agenda del Congreso.

Para la creación del Ministerio de Pesquería hay que empezar por redactar el proyecto, aprobarlo en Consejo de Ministros y de ahí derivarlo al Congreso para su aprobación. ¿Cuánto tiempo pasará para que esto ocurra aun existiendo una voluntad y decisión política en el Ejecutivo?

Recordemos también que la comisión de Producción no pudo aprobar el proyecto de una nueva ley general de pesca y que al tercer mes de la nueva legislatura, este sigue en nada.

En consecuencia, aún con voluntad política, la creación del Ministerio de Pesquería podría demorar un buen rato o no llegar a efectivizarse durante el actual gobierno.

Algunos comentarios al respecto pueden leerse en los siguientes links:

https://revistapesca.blogspot.com/2022/05/el-proyecto-de-ley-que-crea-el.html

https://revistapesca.blogspot.com/2021/05/la-restitucion-del-ministerio-de.html

https://revistapesca.blogspot.com/2020/04/el-ministerio-de-pesqueria-es-la.html

Entonces, lo que sí está en manos del Ejecutivo, es atender temas que se resuelven con resoluciones ministeriales o decretos supremos, como los siguientes:

TEMAS

Los recursos pesqueros para consumo humano directo (en especial los capturados por flota artesanal y de menor escala) están en riesgo de sobreexplotación. Ello por falta de investigación e información que permita elaborar reglamentos de ordenamiento adecuados sobre bases científicas, estableciendo tasas anuales de captura por especie.

La regulación de los recursos pesqueros sin una visión holística (biológica, sanitaria, ecosistémica, social, económica y jurídica) es fuente de toma de decisiones administrativas confusas e ineficientes.

El producto final de la cadena de valor de consumo humano directo no ofrece las debidas garantías de calidad e inocuidad.

El acceso de los productos hidrobiológicos al mercado, especialmente en zonas de extrema pobreza, es muy limitado.

La actividad acuícola crece a un ritmo lento.

La informalidad de la flota artesanal y de menor escala es fuente de problemas de diversa índole.

Asegurar la sostenibilidad de nuestros recursos pesqueros profundizando y ampliando el abanico de especies objeto de investigación científica, que permita diseñar Reglamentos de Ordenamiento Pesquero adecuados.

Acciones a poner en agenda:

Optimizar el ordenamiento del sector para generar eficiencia y alta contribución del sector a la seguridad alimentaria.

Organizar competitivamente la cadena productiva de consumo humano directo, contribuyendo a la seguridad alimentaria con creciente consumo de especies abundantes, especialmente en zonas de extrema pobreza.

Diseñar un plan de trabajo para estimular el crecimiento de la acuicultura y maricultura.

Iniciar un proceso de real y completa formalización, que incluya no solo permisos de pesca a las embarcaciones, sino su adecuación a las normas tributarias y laborales.

Elaboración de las Políticas Nacionales de Pesca y de Acuicultura.

Elaboración de un Programa de Transferencia de Paquetes Tecnológicos de Producción de Recursos Pesqueros con Valor Agregado.

Elaboración de un Plan Nacional de Promoción del Consumo de Productos Hidrobiológicos Abundantes.

Elaboración de un Programa de Creación del Hábito de Consumo y Asistencia Alimentaria dirigido a las poblaciones vulnerables en 3 zonas del país.

Elaboración de un Plan de certificación de competencias para los tripulantes de las embarcaciones pesqueras.

Elaboración de un Plan de desarrollo de servicios de formación, capacitación y asistencia técnica para la producción y comercialización acuícola.

Elaboración de un Plan de formalización de las embarcaciones artesanales y de menor escala.

Elaboración de un Plan de Trabajo y cronograma para la certificación de los DPAs.

Elaboración de un Plan Nacional de Capacitación para el fortalecimiento de la actividad pesquera de consumo humano directo y su cadena productiva.

Elaboración de un programa de mayor investigación de recursos pesqueros en aguas adyacentes al dominio marítimo y dentro del mismo.

Elaboración de un Nuevo ROF del IMARPE en cumplimiento a lo dispuesto en el DU 015-2020.

Elaboración de un Reglamento de Ordenamiento de principales especies objetivo de la pesca artesanal.

Concluir el proceso de transferencia de competencias a los GOREs, desligando al Ministerio de la Producción de las funciones transferidas.

Actualizar la definición de embarcación artesanal y de menor escala.

Actualización de la tasa de los derechos de pesca de todas las especies afectas.

Elaboración de Normas de promoción y estímulo a la inversión y desarrollo acuícola modernizadas y adecuadas en consenso con el sector privado.

Un tema que podría estar en debate es el referido a la modificación del ROF actual del Ministerio. ¿Sería conveniente volver a la estructura que tenía antes de la gestión que diseñó el Plan Nacional de Diversificación Productiva? Hay que recordar que el ROF se modificó, al igual que el PESEM, para adecuarlo a dicho Plan durante el gobierno de Ollanta Humala en cual se destruyo al Instituto Tecnológico Pesquero, también para adecuarlo al mencionado plan que aún no se puede determinar con certeza si fue bueno o malo para el sector pesquero.

http://revistapesca.blogspot.com/2022/09/la-necesidad-de-una-agenda-pesquera.html