Tras la desastrosa gestión de la crisis pandémica (PBI 2020 = -11%), la economía rebotó en 2021 a 13,6%. Con una base más alta, es lógico que el PBI de 2022 no crezca a dos dígitos, pero para ser sostenible debería hacerlo a una tasa cercana al crecimiento potencial previo a la pandemia (4%). A cuatro meses del cierre del año, la economía lo hace por debajo (3,7%).
Hasta agosto la economía ya ha perdido 10 puntos porcentuales de crecimiento. Por mes, en promedio, se viene perdiendo 1,2 puntos porcentuales de crecimiento, si esa tendencia se mantuviese en los siguientes cuatro meses, el PBI de 2022 sería de -1,2%. El plan “Impulsa Perú” tendrá que hacer magia para que el MEF cumpla su estimado de 3,3%.