El BCE elevó sus tasas de interés clave en 75 puntos básicos durante su reunión de octubre, luego de un movimiento similar en septiembre y llevó los costos de los préstamos al nivel más alto desde principios de 2009 mientras lucha contra la alta inflación y una recesión inminente. La decisión llegó en línea con las previsiones.
El tipo de refinanciación se sitúa ahora en 2%, la facilidad de depósito en 1,5% y el crédito marginal en 2,25%. El banco central también espera aumentar aún más las tasas de interés y basará los aumentos futuros en la evolución de la inflación y la economía, en un enfoque de reunión por reunión. También fijó nuevas remuneraciones para las reservas mínimas.