Se espera que el crecimiento económico mundial se desacelere a 2,2% en 2023 desde 3,1% de 2022, según el último Economic Outlook de la OCDE. El mundo, especialmente Europa, enfrenta desafíos importantes, incluidos los altos niveles de inflación persistente, el aumento de los costos de los préstamos, la escasez de suministro de energía y la guerra en curso en Ucrania.
Se prevé que el crecimiento del PBI de la Zona Euro disminuya a solo 0,5% en 2023 (frente al pronóstico de septiembre de 0,3%) desde el 3,3% de este año, con la economía alemana dependiente del gas ruso contrayéndose en 0,3% el próximo año, y Francia e Italia creciendo solo 0,6 % y 0,2%. Por su parte, la economía de EEUU debería crecer sólo 0,5% el próximo año.