Una mayoría sustancial de los funcionarios de la Fed consideró que una desaceleración en el ritmo del aumento de la tasa de los fondos federales probablemente sería apropiada pronto, ya que permitiría al Comité evaluar mejor el progreso hacia sus objetivos de máximo empleo y estabilidad de precios, según las minutas del 1 de noviembre.
Los formuladores de políticas también señalaron que con la inflación mostrando pocas señales de disminuir, y con la persistencia de los desequilibrios de oferta y demanda en la economía, el nivel final de la tasa de fondos federales que sería necesario para lograr los objetivos del Comité era algo más alto de lo que habían esperado anteriormente.