Con ello acumuló un crecimiento de 0,35%, para el periodo anual de 2022. Este desempeño estuvo explicado por el dinamismo de la actividad minera metálica que aumentó en 11,05%, determinado por los mayores volúmenes producidos de hierro (99,4%), cobre (19,2%), plomo (3,2%) y estaño (2,3%).
Por otro lado, el subsector de hidrocarburos se redujo en 1,03% explicado por la menor extracción de líquidos de gas natural (-4,9%); resultado que fue compensado en parte por la mayor explotación de petróleo crudo (4,0%) y gas natural (0,9%). Según los datos del informe técnico de Avance Coyuntural de la Actividad Económica del INEI.