Los futuros del crudo WTI se mantienen por encima de los US$ 68 por barril, después de haber experimentado una pérdida de más del 6% en las dos últimas sesiones. Aunque la estabilidad parece haber regresado, la presión persiste debido a la sorpresiva acumulación de inventarios de crudo en EEUU y las señales de una demanda china más débil, factores que siguen generando incertidumbre en el mercado.
Según los datos del Instituto Americano del Petróleo, las reservas de crudo de EEUU aumentaron en 5.202 millones de barriles la semana pasada. Este incremento desafía las expectativas que anticipaban una disminución de 1,22 millones de barriles, evidenciando un exceso de oferta que podría presionar los precios a la baja.
A esto se suma la preocupación en torno a la demanda de China, el principal importador de crudo del mundo. Datos oficiales revelaron que la actividad manufacturera china se contrajo a un ritmo más rápido en mayo, lo que podría sugerir una demanda de crudo más débil. No obstante, una encuesta privada publicada el jueves señaló un crecimiento inesperado en esta actividad, lo que genera confusión acerca de la verdadera dinámica de la demanda china.
Este escenario complejo y volátil refuerza la incertidumbre sobre la dirección que tomarán los precios del crudo WTI. Por un lado, el crecimiento en los inventarios de crudo de EEUU podría conducir a una disminución de los precios; por otro, la demanda china sigue siendo una incógnita, con datos contradictorios que hacen difícil prever su impacto.