Chile, una economía fuertemente influenciada por sus exportaciones, ha registrado un notable aumento en su superávit comercial en julio de 2023. El superávit se amplió a US$ 814 millones, un salto significativo desde los US$ 71,62 millones registrados en el mismo período del año anterior. Estas cifras reflejan la capacidad de adaptación y resiliencia de la economía chilena en un contexto global incierto.
Las exportaciones experimentaron una caída del 7,6% en comparación con el año anterior, situándose en US$ 7.394 millones, su nivel más bajo en casi un año y medio. Esta disminución se debe principalmente a la reducción en los envíos de minería, que cayeron un 9,7% a US$ 4.130,8 millones, y a la industria, con una caída del 5,8% a US$ 2.906 millones. Sin embargo, es importante destacar el sector de agricultura, silvicultura y pesca, que contrarrestó esta tendencia con un aumento del 4,9% en sus ventas, alcanzando los US$ 357 millones.
Por el lado de las importaciones, Chile registró una disminución del 17% a US$ 6.579,9 millones. Las compras de bienes de consumo experimentaron una caída significativa del 25,1% a US$ 1.835 millones, y las importaciones de bienes intermedios se desplomaron un 21,3% a US$ 3.803 millones. A pesar de esta tendencia general, las compras de bienes de capital mostraron una ligera disminución del 1,1%, situándose en US$ 1.448 millones. Estas cifras sugieren una posible reestructuración en las prioridades de importación del país, posiblemente en respuesta a cambios en la demanda interna y a estrategias económicas a largo plazo.