El Índice de Gerentes de Compras (PMI) manufacturero del Instituto de Gerencia y Abastecimiento (ISM) mostró una ligera mejora en agosto de 2023, al subir a 47,6 desde 46,4 en el mes anterior. Este aumento superó ligeramente las expectativas del mercado, que anticipaban un índice de 47,0. Sin embargo, es importante destacar que cualquier lectura por debajo de 50 en el PMI indica contracción en el sector, y este es el décimo mes consecutivo en que el sector manufacturero experimenta una contracción.
A pesar de la mejora en el índice, varios aspectos del sector manufacturero siguen siendo preocupantes. Los niveles de producción se estabilizaron, pero la entrada de nuevos pedidos disminuyó a un ritmo más rápido. Además, aunque el ritmo de eliminación de empleos mostró signos de moderación, la situación laboral en el sector sigue siendo delicada. En cuanto a los costos, los precios de los insumos se mantuvieron moderados, pero mostraron signos de revertirse. La medida de los precios pagados por los fabricantes en la encuesta aumentó a 48,4 en agosto desde 42,6 en julio.
El hecho de que el PMI se haya mantenido por debajo del umbral de 50 desde noviembre del año pasado indica un período prolongado de contracción en el sector manufacturero. Esto podría tener implicaciones significativas para la economía en general, especialmente si la tendencia continúa. La estabilización en los niveles de producción y la moderación en la eliminación de empleos son signos positivos, pero la disminución en la entrada de nuevos pedidos y el aumento en los precios de los insumos podrían ser indicadores de desafíos futuros. Será crucial observar cómo estos factores evolucionan en los próximos meses para tener una comprensión más completa de la salud del sector manufacturero.