PBI per cápita no alcanzará niveles previos a pandemia hasta 2025

El debate entre analistas económicos sobre el crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) de Perú en el presente año sigue vigente. A pesar de las diferentes perspectivas, hay un consenso generalizado: la tasa de crecimiento no superará el 1%. Esta situación se ve respaldada por los datos de agosto de 2023, que muestran una contracción del 0,63%. El PBI per cápita, que refleja el bienestar o calidad de vida de un país, se ha convertido en un indicador esencial para evaluar la situación económica.

Al cierre de 2022, Perú registró un PBI per cápita de US$ 7.157, posicionándose en un rango medio en comparación con otros países de la región. Uruguay, Chile y México lideran la lista con cifras de US$ 20.004, US$ 15.091 y US$ 11.270 respectivamente. Por otro lado, Venezuela y Bolivia presentan los valores más bajos. La población peruana ha experimentado un crecimiento anual del 1% en los últimos años. Si la economía crece a tasas inferiores al 1%, el PBI per cápita disminuirá automáticamente.

El Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) ha proporcionado datos que muestran que entre 2003 y 2013, el PBI per cápita creció en promedio más del 5% anual. Sin embargo, entre 2014 y 2019, este ritmo disminuyó al 1,5% anual. La pandemia de 2020 causó una contracción del 12,3%, y aunque 2021 vio una recuperación del 11,9%, 2022 solo experimentó un crecimiento del 1,6%. Estos datos reflejan la complejidad y los desafíos que enfrenta la economía peruana.

El PBI per cápita es un componente esencial del Índice de Desarrollo Humano (IDH), y su evolución está estrechamente relacionada con la reducción de la pobreza. Durante la pandemia, la tasa de pobreza en Perú aumentó significativamente, alcanzando el 27,5% en 2022. Se estima que, debido al fenómeno de El Niño, esta cifra podría llegar al 30% el próximo año. Además, Perú ha descendido en el ranking global del IDH, lo que indica un retroceso en varios indicadores de desarrollo. Estas cifras y tendencias subrayan la urgencia de implementar medidas efectivas para revitalizar la economía y mejorar la calidad de vida de la población.