América Latina en un momento crítico por la inseguridad

La inseguridad en América Latina ha alcanzado niveles críticos debido a la expansión del crimen organizado y la debilidad del Estado de Derecho, especialmente en países como Venezuela y Nicaragua. Este panorama ha sido exacerbado por la creciente influencia de mafias transnacionales y el auge del narcotráfico, que está migrando de la cocaína a drogas sintéticas.

  • Inseguridad y crimen organizado: Douglas Farah, presidente de IBI Consultants, destacó cómo los grupos criminales están ocupando espacios antes controlados por los Estados en Venezuela y Nicaragua, lo que está desestabilizando la región. La expansión de grupos criminales y la pérdida del control estatal están creando un entorno cada vez más inseguro en América Latina.
  • Olas del narcotráfico: Farah describió la evolución del narcotráfico en América Latina en cuatro fases: desde los carteles tradicionales como el de Medellín y Cali hasta la actual «cuarta ola», caracterizada por la llegada de mafias italianas, albanesas y turcas, así como el auge de las drogas sintéticas como el fentanilo.
  • Narcotráfico y violencia en la región: En países como Ecuador, la presencia del crimen organizado ha sido facilitada por la dolarización y la apertura de puertos que permiten el tráfico de drogas. El reclutamiento de menores para actividades criminales es otra tendencia alarmante en países como El Salvador y Honduras, donde niños son entrenados como sicarios desde los 8 años.
  • Debilidad de las estrategias de seguridad: Farah critica las políticas estadounidenses en la región, señalando que están basadas en enfoques de los años 80, sin adaptarse a la realidad del crimen transnacional actual. Propone crear alianzas internacionales y establecer marcos legales comunes para enfrentar los nuevos retos de seguridad.

  • Efecto en la inclusión financiera: La inseguridad está afectando la capacidad de los países para avanzar en la inclusión financiera, especialmente en las zonas más afectadas por el crimen organizado. Esto agrava la desigualdad y limita el acceso a servicios financieros esenciales para los sectores más vulnerables.
  • Ecuador como epicentro del crimen transnacional: Farah destaca que Ecuador es un caso emblemático de la expansión del crimen organizado, debido a factores como la economía dolarizada y la apertura de las fronteras durante el gobierno de Rafael Correa, que facilitaron la entrada de organizaciones criminales internacionales.

  • Desestabilización regional: La expansión del crimen organizado en América Latina pone en riesgo la estabilidad de los gobiernos democráticos y podría provocar mayores problemas sociales y económicos en la región. La falta de control estatal en países clave puede desatar una mayor ola de migración y conflictos internos.
  • Urgencia de nuevas estrategias de seguridad: Los Estados de América Latina y sus socios internacionales deberán rediseñar sus estrategias de seguridad para enfrentar este complejo entorno. La cooperación regional e internacional será fundamental para crear marcos legales que aborden la naturaleza cambiante del crimen organizado y el narcotráfico en la región.

  • ¿Qué acciones concretas pueden tomar los gobiernos latinoamericanos para fortalecer sus instituciones y recuperar el control territorial frente al crimen organizado?
  • ¿Cómo afectará la transición del tráfico de cocaína a drogas sintéticas, como el fentanilo, a las políticas de seguridad y salud pública en la región?
  • ¿Qué papel jugarán los países extranjeros, como EEUU, en la creación de políticas de seguridad más efectivas en América Latina?