Bolivia, uno de los principales productores mundiales de quinua, estima por segundo año consecutivo una caída en la cosecha del cereal. En 2016 «va a bajar sustancialmente la producción de quinua. Por un lado por la sequía, pero también por la falta de incentivo a la siembra, como consecuencia de la depresión del mercado», dijo el ministro boliviano de Desarrollo Rural y Tierras, César Cocarico, a la prensa local.
Informó que producto de los factores señalados (además de la fuerte competencia de Perú), la producción de quinua boliviana tuvo un descenso de hasta un 25% en 2015, según datos de la Cámara Boliviana de Exportadores de Quinua y Productores Orgánicos (Cabolqui), que estimó la cosecha en 23, 894 toneladas.
En 2015 los ingresos por las ventas de quinua al exterior también cayeron: se vendió por cerca de US$ 103 millones, mientras que un año antes se obtuvieron US$ 197 millones, informó el ministro.
Del total de las exportaciones de quinua de Bolivia, un 60% tiene como destinos Estados Unidos y Canadá; un 25% Europa, y el resto otros países de América latina, Asia y de Medio Oriente.