Brasil enfrentará eventualmente un déficit de 3, 6 billones de reales (US$ 900 mil millones) en fondos para pagar a empleados públicos en funciones o jubilados, equivalente al 66% del Producto Bruto Interno (PBI) del país.
De acuerdo al autor del informe, Marcelo Caetano, Brasil necesita eliminar el trato especial en el sistema nacional de pensiones. Actualmente, Brasil otorga a los empleados públicos municipales, estaduales y federales, beneficios mucho más generosos que los del sistema general para el sector privado, que también sufre un déficit.
El informe mostró que sólo 980 mil empleados públicos (US$ 10.159 millones) el 2015, mientras que 28, 3 millones de jubilados en el sector privado generaron un déficit de 85.800 millones de reales (US$ 21.749 millones) el año pasado.
El informe no especificó cuándo el déficit alcanzará los 3, 6 billones de reales (US$ 900 mil millones), pero basó su cifra en el momento en que los actuales trabajadores probablemente se retiren.
Ipea, un instituto de investigación económica relacionado con el Gobierno, dijo que 13 de los 26 estados de Brasil carecen de recursos para pagar siquiera un año de beneficios jubilatorios, publicó Globo.
El estudio, cuyos cálculos se basaron en datos de nóminas del 2014, llamó a la reforma del sistema de pensiones del país.