En línea con el resto de los países de la región, el saldo de la cuenta corriente de Brasil anotó un déficit de US$ 3.510 millones en mayo, el segundo más amplio en lo que va del año. En igual mes de 2021, el déficit fue de US$ 2.500 millones, mientras que en abril pasado se había logrado un superávit de US$ 1.088 millones (el primero luego de siete déficits mensuales consecutivos).
El superávit de bienes se redujo a US$ 3.450 millones desde US$ 7.380 millones en mayo de 2021, y la brecha de servicios se amplió a US$ 2.380 millones desde US$ 1.630 millones. Al mismo tiempo, el déficit del ingreso primario aumentó a US$ 4.930 millones desde US$ 3.490 millones, en tanto que el superávit del ingreso secundario aumentó levemente a US$ 0,35 millones desde US$ 0,25 millones.