Los principales indicadores de actividad económica de China mostraron una inesperada desaceleración en julio, obligando al gobierno a intensificar medidas para hacer frente a las crecientes dificultades, como el resurgimiento del Covid-19 y la debilidad de la economía mundial. Entre las medidas se espera que hoy el Banco Central de China baje sus tasas de interés, favoreciendo la demanda.
China mejorará su régimen de tasas basado en el mercado y apoyará un repunte de la demanda efectiva de crédito, con ello reducirán los costos de financiación para las empresas y los costes de crédito para los consumidores. Entre otras medidas, se buscará ampliar una exención de impuestos a la compra de vehículos de «nueva energía» hasta finales de 2023 como parte de las medidas para impulsar el consumo interno.