Luego de que Estados Unidos y China hayan atemorizado, en los últimos meses, al mercado financiero con la aplicación de aranceles recíprocos valuados en US$ 50.000 millones, el gobierno de Trump amenaza con implementar nuevas medidas arancelarias hacia el país asiático; con tarifas valuadas en US$ 200.000 millones. Ante esto, el portavoz del ministerio Gao Feng afirmó que de concretarse la decisión, China desplegará las medidas de represalia necesarias.
Esto es una advertencia para los mercados, pues se teme que cualquier nuevo impuesto de Washington a las importaciones chinas intensifique la disputa comercial entre los gigantes económicos y genere un obstáculo significativo en la inversión, el comercio y, por ende, en el crecimiento mundial.