Los futuros del crudo WTI experimentaron un aumento significativo, superando los US$ 86 por barril el martes. Este repunte se produce después de una marcada caída que duró dos días y se ve influenciado por las crecientes tensiones en Medio Oriente, específicamente entre Israel y Hamas.
La escalada del conflicto entre Israel y Hamas ha generado preocupaciones en el mercado global sobre la posibilidad de que esta situación desencadene un conflicto más amplio en la región de Medio Oriente, lo que podría afectar el suministro de petróleo. Israel mantuvo su ofensiva en Gaza, mientras que otros países intensificaron sus esfuerzos diplomáticos en un intento por contener la violencia en la zona.
Además de las tensiones geopolíticas, otros factores han influido en el precio del petróleo. Las expectativas de un déficit de mercado más pronunciado en el cuarto trimestre se mantienen, especialmente después de que dos de los principales productores, Arabia Saudita y Rusia, decidieran prolongar los recortes de suministro hasta finales de año. En otro desarrollo relevante, EEUU decidió suspender gran parte de las sanciones impuestas a Venezuela, miembro de la OPEP, tras el compromiso de los líderes venezolanos de llevar a cabo elecciones justas el próximo año.
El mercado petrolero se encuentra en un momento de alta volatilidad y sensibilidad a las noticias geopolíticas. Las tensiones en Medio Oriente, junto con las decisiones de los principales productores y las acciones diplomáticas de EEUU, están moldeando el panorama del mercado del crudo. Los inversores están atentos a los próximos informes sobre los inventarios de crudo de EEUU, buscando señales que les ofrezcan una perspectiva más clara sobre la oferta y demanda en el principal consumidor de petróleo del mundo.