El rendimiento del Tesoro estadounidense a 10 años superó el 3,5%, acercándose a niveles no vistos desde abril de 2011, en medio de las expectativas de que la Reserva Federal acelerará aún más el ritmo de su ajuste monetario debido a una inflación obstinadamente alta. Además, los rendimientos de los certificados a 2 años aumentaron a un máximo de 15 años a 3,94%.
La semana pasada, los datos mostraron una inflación anual de 8,3% en agosto, desacelerándose menos de lo esperado, mientras que las ventas minoristas superaron las previsiones y las solicitudes semanales de desempleo cayeron a su nivel más bajo desde mayo, aumentando la probabilidad de un alza de 100 puntos básicos en las tasas de interés.