Los futuros del crudo West Texas Intermediate (WTI) se mantuvieron estables alrededor de US$ 74 por barril después de experimentar un aumento superior al 4% la semana pasada. Este nivel de estabilidad se debe a una serie de factores que afectan el mercado del petróleo, tanto a nivel global como nacional.
Las preocupaciones sobre una desaceleración económica global han generado incertidumbre en el mercado petrolero. Existe el temor de que una desaceleración económica reduzca la demanda de petróleo, lo que podría tener un impacto negativo en los precios. Esta preocupación ha contrarrestado las expectativas de suministros globales más ajustados por parte de países como Arabia Saudita y Rusia.
A nivel nacional, los datos recientes muestran un crecimiento salarial aún fuerte y una ligera disminución en la tasa de desempleo. Estos factores podrían llevar a la Reserva Federal a mantener su postura de aumentar las tasas de interés, lo que también podría influir en los precios del petróleo. Además, se ha observado un aumento en el número de plataformas de petróleo y gas natural en Estados Unidos, lo que indica una mayor producción y suministro interno.