El gobierno argentino prevé que la reducción del impuesto a la exportación de biodiésel aliviará la presión del sector golpeado por la caída de los precios del petróleo y por trabas comerciales de la Unión Europea. Con una nueva tasa de 3, 65%, mucho menor al 6, 4% estipulado por el Ministerio de Energía el mes previo.
El sector del biodiésel en Argentina viene operando con una capacidad ociosa de cerca del 60%, con la demanda doméstica saturada ya que la ley local establece la obligación de mezclar el diésel comercializado en el país con un 10% del biocombustible. En ese sentido, la reducción podría incentivar la exportación del hidrocarburo, según informó Reuters.
A fines de marzo, la Organización Mundial de Comercio (OMC) falló a favor de varios reclamos de Argentina, contra los aranceles antidumping que impuso hace años la Unión Europea a las importaciones del biocombustible proveniente del país austral.
El Ministerio de Energía de Argentina publica mensualmente los cambios en el tributo sobre las ventas externas del biodiésel, elaborado principalmente en base a aceite de soja, su mayor cultivo nacional.
Los agricultores argentinos están comenzando a recolectar una cosecha de soja 2015/16 que podría alcanzar un volumen de casi 61 millones de toneladas, según estimaciones oficiales.