Ayer en Expomina 2014, Verónica Tramer, directora de la Oficina Comercial de Chile en Perú, mencionó que el bloque Perú-Chile representa el “hub minero más grande del mundo” debido a que en conjunto se han anunciado para los próximos 10 años inversiones en 103 proyectos mineros por un valor de más de US$ 160 mil millones, una cifra tan relevante que en términos económicos representa el 34, 3% del PBI agregado 2013 de ambos países. Hasta aquí las buenas noticias para el Perú, ya que si se hace un análisis más profundo de la información, nos percataremos que de esa enorme cifra el 63, 8% (US$ 104.851 millones) se ejecutará en territorio chileno y el saldo restante (US$ 59.582 millones) en territorio peruano, y esto se debe a que mientras en Perú sólo dos de los 50 proyectos mineros sobrepasan los US$ 4 mil millones de inversión (Conga US$ 4.800 millones y Las Bambas US$ 5.200 millones), en Chile 10 de los 53 proyectos superan con creces dicha cifra (por mencionar los más notables: Los Pelambres IV US$ 7.000 millones, Nueva Andina II US$ 6.586 millones, Collahuasi III US$ 6.500 millones y Cerro Casale US$ 6.000 millones).
Las diferencias entre los proyectos chilenos y peruanos no quedan allí. Desde la perspectiva de la inversión por mineral, si bien en ambos países la cartera de proyectos se concentra en la producción de cobre, los montos de inversión son disparejos, ya que en Perú se invertirán US$ 35.765 millones (60% del total en Perú) y en Chile la impresionante suma de US$ 80.622 millones (77% del total en Chile). Según el grado de condicionalidad de la inversión, se observa que en Perú la incertidumbre es mayor puesto que son 42 los nuevos proyectos mientras que en Chile el número es de 23. Por último, pero a todas luces la diferencia más importante, mientras en Perú el origen de la inversión es primordialmente extranjero (menos del 10% son capitales nacionales), en Chile el 47, 4% de la inversión es nacional. Ante estos abrumadores datos: ¿puede la inversión minera en el Perú superar a la de Chile en el mediano plazo?, la respuesta es sí, Perú tiene por consigna seguir escalando en el índice de atractividad para la inversión minera del Instituto Fraser apelando a importantes ventajas comparativas como el hecho que el costo de la energía para actividades mineras es 50% más bajo que en el país del sur y que sólo el 1, 2% del territorio nacional ha sido explorado o explotado; sin embargo, no basta con eso para poder atraer más inversión minera, las autoridades deberán ser inflexibles en la eliminación de barreras burocráticas y conatos de subversión en las zonas de explotación. A no olvidar: Perú país minero.