Tras aprobar la distribución masiva de la vacuna de Pfizer/BioNTech, el Reino Unido se dispone a desplegar la primera campaña en un país occidental de vacunación contra el coronavirus, una operación larga y logísticamente compleja. Los controles realizados por la Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios (MHRA) británica son los equivalentes a todas las normas internacionales, aseguró June Raine, directora de este organismo independiente. Para ganar tiempo equipos separados trabajaron en paralelo, con fines de semana incluidos. En opinión de la doctora Penny Ward del King’s College de Londres, las diferencias de procedimiento entre la MHRA, la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) pueden explicar la velocidad de los británicos. La vacuna, que mostró un 95% de efectividad en los ensayos clínicos, requiere dos inyecciones con 21 días de diferencia. BioNTech y Pfizer afirmaron que esperan suministrar hasta 50 millones de dosis a nivel mundial en 2020 y hasta 1.300 millones en 2021. El Reino Unido ha pedido un total de 40 millones y espera recibir un lote inicial de 800.000, que permite inocular a 400 mil personas, para comenzar su distribución la próxima semana. Las autoridades reguladoras aún deben aprobar la vacuna en Estados Unidos, que ha pedido 100 millones de dosis, y en la Unión Europea, donde se han pedido 300 millones. La campaña de inmunización seguirá un orden de prioridades. Los residentes de los geriátricos son los primeros en la lista, seguidos por sus cuidadores y las personas mayores de 80 años. De momento, el último grupo previsto son los mayores de 50 años. No se recomienda administrarla a las mujeres embarazadas y los niños, con algunas excepciones. Entre los mayores desafíos técnicos la vacuna Pfizer/BioNTech tiene que ser almacenada a muy bajas temperaturas, entre 70ºC y 80ºC bajo cero. Los centros de inoculación deberán estar equipados con congeladores apropiados. Según el diario Daily Telegraph, el ejército levantará 10 grandes centros en las principales ciudades. Los 40 millones de dosis pedidas por las autoridades británicas permitirán vacunar a 20 millones de personas, menos de un tercio de su población (66,5 millones de habitantes).
NOTICIAS, ANÁLISIS ECONÓMICO Y DE NEGOCIOS