Según la clasificación anual de The Economist Intelligence, Singapur es la cuidad más cara del mundo por quinto año consecutivo. La principal razón es el precio exorbitante de sus automóviles; este precio a diferencia de otros países se debe a que pagar la licencia de conducir cuesta 31.000 euros. Esta situación la sitúa por delante de ciudades como París o Zúrich, empatadas en el segundo lugar en este ranking. Cabe mencionar que para el ordenamiento no se considera el precio de la vivienda.
Le siguen Hong Kong, Oslo, Seúl y Ginebra. Las diferencias anuales en esta lista son explicadas por las fluctuaciones de las divisas, sin embargo, existen cambios interesantes con respecto al año pasado, por ejemplo ninguna ciudad de Estados Unidos se encontró entre las diez ciudades más caras por culpa de la debilidad que presento el dólar. Por otro lado, Tokio salió de esas ubicaciones mientras que Caracas es una de las ciudades más baratas del mundo junto a Damasco (Siria) que ocupa el primer lugar.