El titular del Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento, Francisco Dumler, manifestó que el proyecto de tratamiento de aguas residuales del Lago Titicaca continúa trabajándose bajo el esquema de Alianza Público-Privada (APP) y tendrá una inversión de US$ 624, 12 millones.
Indicó que esta iniciativa, que se presentó en la ventanilla de proyectos el 2014, consiste en hacer el tratamiento de estas aguas contaminadas, en parte por el uso que se le da la población y por los relaves provenientes de la minería ilegal.
“Nosotros tenemos avanzando este esquema (APP) para hacer este tratamiento simultáneo de estas diez plantas de tratamiento, que están ubicadas en las diez principales ciudades lacustres del Lago Titicaca, donde Juliaca y Puno son las más importantes”, precisó el titular del MVCS.
Asimismo, señaló que este lago está “empezando a morir” por lo que es necesario “salvarlo y recuperarlo”, iniciativa en la que participa además el país vecino, Bolivia, ello luego del acuerdo logrado tras la reunión de los dos presidentes, Ollanta Humala y Evo Morales.
De otro lado, resaltó que el Decreto Legislativo N° 1185, presentado al amparo de las facultades legislativas, tiene la finalidad de evitar que la ciudad de Lima se quede sin agua subterránea.
“18% del total del agua de Lima viene de fuentes de uso subterránea, que es un recursos que necesita reponerse, por lo tanto lo que necesitamos es que se hagan inversiones para que se recargue”, explicó.
Informó que la producción de estos pozos de agua subterránea se concentra en los distritos de Carabayllo, Ate, Cercado de Lima y el Callao, por lo que si se producen problemas con este abastecimiento, se verían afectadas estas zonas de la ciudad.
“Esta agua subterránea es una reserva de contingencia para que en un eventual caso de siniestro, desastre o desabastecimiento de agua superficial se pueda recurrir a ella. Lima es una ciudad con concentración de empresas e industrias y el ritmo de crecimiento económico va acompañado de un mayor uso de recurso hídrico”, añadió.