En base a una estimación preliminar, la tasa de inflación de los precios al consumidor en la Zona Euro experimentó una disminución en mayo de 2023, alcanzando un nivel del 6,1%. Esto representa una baja con respecto al mes anterior, cuando la tasa se ubicó en el 7,0%, y también se sitúa por debajo de las expectativas del mercado, que apuntaban a un 6,3%. Es importante destacar que esta tasa aún se mantiene significativamente más alta que el objetivo del Banco Central Europeo (BCE) del 2,0%.
La disminución de la inflación se debe principalmente a una caída del 1,7% en los precios de la energía. Este descenso contrasta con el aumento del 2,4% registrado en abril. Además, se observó una desaceleración en las presiones de costos en otros sectores. Los precios de alimentos, alcohol y tabaco tuvieron un incremento del 12,5%, en comparación con el 13,5% del mes anterior. Asimismo, los bienes industriales no energéticos experimentaron un aumento del 5,8% en mayo, frente al 6,2% registrado previamente. En cuanto a los servicios, se registró un crecimiento del 5,0%, en comparación con el 5,2% del mes anterior.
Por otro lado, la tasa de inflación subyacente, que excluye la energía, alimentos, alcohol y tabaco, también mostró una moderación mayor de lo anticipado, ubicándose en el 5,3%. Este indicador es relevante ya que proporciona una visión más precisa de la tendencia inflacionaria subyacente, al eliminar la volatilidad asociada a los precios de estos elementos mencionados.