¿Somos menos pobres porque pecamos más?

El Mapa de Pobreza del Perú para 2018 que acaba de divulgar el INEI, revela que la concentración de la pobreza monetaria se ha trasladado de la sierra y selva sur a la sierra norte, y que el número de provincias y distritos con alto nivel de pobreza ha disminuido sustantivamente.

Efectivamente, dicho mapa muestra que entre 2013 y 2018 la pobreza monetaria disminuyó en 1.119 distritos del Perú; en cerca del 60% de los distritos del país. Mientras en 2013 había 495 distritos (26,4%) con una tasa de pobreza mayor al 60% en 2018 sólo 116 distritos (6,2%) mantuvieron esa situación. En 2018, 78 de los 79 distritos que en 2013 tenían una tasa de pobreza mayor a 80%, redujeron su nivel de pobreza.

En ese lapso, 331 distritos redujeron su pobreza monetaria en más de 20 puntos porcentuales, siendo más de un tercio (37%) distritos con una población menor a 2 mil habitantes.

Pero cuidado. No todo lo que brilla es oro. Conviene tomar con pinzas este resultado, puesto que en gran medida puede obedecer al auge de la minería ilegal del oro en Puno y Madre de Dios, la tala ilegal en Madre de Dios, Ucayali, Loreto, Amazonas y San Martín, y el contrabando en Puno.

Las zonas del Perú que han venido viviendo un auge económico gracias al narcotráfico son el VRAEM, la selva de Puno, Madre de Dios, la periferia de Lima, Trujillo, Chiclayo y Piura, en numerosas rutas secundarias y en ciudades como Huamanga, Andahuaylas y Huancayo. “Un asunto preocupante y reconocido es el incremento de capacidad de producción hasta 491 toneladas de cocaína por año, lo que da cuenta de la potencia adquirida y la mayor cantidad de gente involucrada como productores, asalariados, transportistas, vendedores. Se mantiene la expansión de pistas clandestinas de aterrizaje en la Amazonía, así como de cientos de pozas de maceración que involucran al productor en traficante, otorgándole mayores ingresos.”[1]

El mapa de pobreza muestra que de las 20 provincias más pobres em 2018, 10 se ubican en el departamento de Cajamarca, 3 en Áncash, 2 en La Libertad y 1 en Pasco, Piura, Huánuco, Ayacucho y Amazonas. Mientras entre los 20 distritos más pobres, 16 están en el departamento de Cajamarca, 3 en Ayacucho y 1 en Huancavelica.

Dicho mapa de pobreza muestra que hay 22 distritos en los que la pobreza monetaria aumentó en más de 20 puntos porcentuales; todos ellos con una población menor a 5 mil habitantes. Áncash tiene 11 de ellos, Cusco y Loreto tienen 2, mientras que Amazonas, Huancavelica, Ica, Lima y Puno tienen 1. Se necesita más desarrollo agrícola, industrial y minero sostenible para estas zonas, para evitar que sucumban a la tentación del narcotráfico y demás actividades delictivas.

En particular, todos los distritos de la provincia de Pallasca han aumentado sus tasas de pobreza monetaria, por ser muy vulnerables a las inundaciones. Se requiere aquí una actividad de prevención de desastres más efectiva.

El actual gobierno se ha trazado la meta de reducir la pobreza monetaria a un 18% en 2021. Sin embargo, es preciso asegurar que esa reducción provenga de actividades económicas sostenibles y legales y no de actividades delictivas y depredadoras del ambiente.

 

 


[1] La Situación del Narcotráfico: Perú 2018. Informe SER. Diciembre de 2018.