La minera Buenaventura está apostando por el desarrollo de nuevos proyectos auríferos para reactivar su producción, que caería levemente en 2014 frente al año anterior. Uno de estos proyectos es Chucapaca, en Moquegua, en el que invertirá cerca de US$ 700 millones para comenzar a producir en el 2017, sostuvo hoy su presidente ejecutivo, Roque Benavides. La compañía minera tomó el control de Chucapaca en agosto, tras comprar el 51% a la sudafricana Gold Fields , que consideraba que la inversión prevista era muy elevada. “El capex que se planteaba con Gold Fields era por encima de US$ 2, 000 millones y acá estamos hablando de un proyecto de mina subterránea de menos de US$ 700 millones”, refirió Benavides. “Será una menor producción pero mucho más rentable, estamos hablando de entre 200, 000 y 300, 000 onzas de oro por año, y con tajo abierto se hablaba de 500, 000 onzas, esa es la diferencia”, agregó.
El ejecutivo explicó que recientemente alcanzó un acuerdo con las comunidades para adquirir 1, 300 hectáreas en torno a Chucapaca y en los próximos días se firmaría el acta de acuerdo. “La adquisición de Chucapaca es un paso muy importante, es probablemente una de las adquisiciones más grandes que hemos hecho en la historia de la empresa”, precisó. Otro proyecto a desarrollar es Tambomayo, que produciría unas 200, 000 onzas de oro anuales desde inicios del 2016, con una inversión de US$ 200 millones. En la mina de oro La Zanja, un emprendimiento que comparte con la estadounidense Newmont, la firma decidió también desarrollar el depósito “Alejandra”, que requerirá la construcción de una planta de flotación y de cianuración para su explotación.