Vietnam, una lección a aprender

En las últimas tres semanas el autor ha venido participando en una misión de asistencia técnica del FMI al gobierno de Vietnam en materia tributaria, a través de videoconferencias con las autoridades. En esta entrega comparto con los lectores las medidas que el gobierno de Vietnam ha tomado para enfrentar el Covid-19.

A medida que el mundo entra en el sexto mes de la pandemia, Vietnam reporta, al 8 de mayo, solo 288 casos confirmados (47 activos y 241 recuperados) y ningún fallecido por causa del virus. Este nivel de contagio es notablemente bajo para un país de más de 90 millones de habitantes, y es aún más impresionante dada su extensa frontera y cercanía comercial con China, donde se originó el virus. Este resultado supera a otros países que han sido considerados exitosos en la lucha contra el Covid-19. Por ejemplo, Corea del Sur, reporta 10,840 casos confirmados y 256 fallecidos y Nueva Zelanda 1,492 casos y 21 muertos, ambos países con una población muy por debajo de Vietnam. Los casos de éxito contrastan con los resultados menos exitosos de Reino Unido, EUA o del Perú (ver Gráfico 1)

 

 

La comparación con el Perú es muy relevante porque más del 65% de la fuerza laboral de Vietnam es informal y su desarrollo económico de las últimas décadas se ha basado en la apertura económica y en el crecimiento significativo de la inversión extranjera y las exportaciones.

¿Cuál ha sido la clave del éxito de Vietnam en su lucha contra el Covid-19? El modelo de Vietnam para contener el brote ha sido reconocido como un modelo exitoso de bajo costo. Mientras que sus vecinos, Taiwán y Corea del Sur, podían permitirse pruebas moleculares masivas, Vietnam carecía de los recursos y en su lugar optó por la prevención selectiva pero proactiva. Aparte de algunas medidas de política comunes, como el rastreo de contactos, el aumento de la producción de suministros médicos y la instalación de puestos de control en los aeropuertos, Vietnam encontró su éxito en las medidas proactivas de contención de la pandemia. En lugar de decretar cuarentenas generalizadas, durante los cuatro meses desde el primer caso Vietnam ha aplicado cuarentenas rígidas pero focalizadas, limitando los movimientos en las poblaciones con focos de infección, equilibrando la prudencia con la precisión.
El 29 de enero, el Ministerio de Salud estableció 40 equipos móviles de respuesta a emergencias, que estuvieron listos para ayudar a los lugares afectados, para la cuarentena, la desinfección, la aplicación de pruebas moleculares y el transporte de pacientes o sospechosos. Vietnam ha aplicado más de 250,000 pruebas moleculares y tan solo ha detectado 288 casos de infectados.

CUARENTENAS FOCALIZADAS

Para aplicar las cuarentenas rígidas focalizadas, se entregó a las autoridades provinciales los mencionados equipos móviles de salud y se les dio el apoyo del ejército y de voluntarios del partido comunista para encerrar en forma rígida aldeas y comunas con casos detectados, con la debida difusión de comunicados del Ministerio de Salud. El primer caso de una cuarentena rígida pero focalizada fue el 13 de febrero cuando la provincia de Vinh Phuc confirmó varios pacientes infectados en la comuna de Son Loi, distrito de Binh Xuyen. Ese mismo día, las autoridades locales encerraron la comuna de 10,600 personas y, usando pruebas masivas, confirmaron ocho pacientes infectados y establecieron dos hospitales de campaña en el distrito.

El “task-force” creado para la cuarentena focalizada activó tiendas de alimentos móviles para evitar que los pobladores salieran de su comuna y repartieron mascarillas gratis a todos los aldeanos, en un esfuerzo por contener la propagación del virus. Los 10,600 pobladores fueron divididos en grupos de 50 a 60 hogares cada uno, cada uno asignado a un equipo de supervisión responsable de las visitas diarias al hogar y los controles de salud. La cuarentena fue levantada el 4 de marzo, después de 20 días sin nuevos casos.

Este tipo de intervenciones se repitió en más de veinte ocasiones. El 7 de marzo Hanoi cerró todo un barrio alrededor de la calle Bach Truc, donde se ubicó a un infectado que residía en la zona junto con 66 hogares y 189 personas. La cuarentena se levantó el 20 de marzo después de que no se notificaran nuevos casos y una vez realizadas pruebas moleculares masivas en el barrio. Las cuarentenas rígidas focalizadas han logrado contener los riesgos de transmisión comunitaria al hacer cumplir estrictamente los puestos de control dentro y fuera de las localidades y establecer instalaciones médicas locales para pruebas y tratamientos.

Las intervenciones focalizadas han sido acompañadas de restricción estricta de viajes interprovinciales. Todas las personas que se movilizan dentro del país están obligados a una cuarentena de 14 días en el lugar de destino. Lo mismo ocurre con los pasajeros que llegan en vuelos internacionales. Como en otros países, Vietnam también ha cerrado las escueles y universidades y todo tipo de evento masivo y ha facilitado mascarillas y aplicado otras medidas para asegurar el distanciamiento social.

Adicionalmente, el gobierno ha demostrado un liderazgo eficaz durante la pandemia, proporcionando información con transparencia. El Ministerio de Salud tomó la iniciativa de lanzar un sitio web y una aplicación móvil no solo para facilitar el proceso médico y el monitoreo de las pruebas, sino también para difundir información precisa rápidamente. Al ser transparente y proactivo al comunicarse con el público, el Gobierno ha podido ganar y mantener la confianza de la población.

REACCIÓN CERTERA

Clave en el éxito de Vietnam ha sido la experiencia ganada en el combate al SARS de años anteriores. La planificación adecuada basada en la experiencia de casos anteriores ha permitido a las autoridades de Vietnam reaccionar con rapidez y precisión.

¿Podemos aplicar las experiencias al caso peruano? Lamentablemente la estrategia de Vietnam funciona cuando se organiza la estructura de prevención en las primeras fases de la pandemia donde las cuarentenas focalizadas tienen mayor resultado. Sin embargo, estimamos que las cuarentenas focalizadas al estilo practicado por Vietnam podrían ser utilizadas en nuestro país como estrategia de salida de la cuarentena generalizada, especialmente en barrios o regiones con alto grado de infección o reacios a cumplir las disposiciones de la cuarentena. Ese enfoque también puede servir para facilitar la reanudación de actividades de unidades productivas que puedan “encapsular” a sus trabajadores, como, por ejemplo, las empresas mineras. Las autoridades tienen la palabra.