El Banco Mundial espera que el crecimiento de América Latina sea de 0,4 puntos menor de lo previsto para este año y se ubicaría en 2,3% como consecuencia de las mayores presiones inflacionarias derivadas de la guerra entre Rusia y Ucrania. Para el 2023 se estima que la región crezca 2,2%, logrando la mayoría de los países revertir las pérdidas ocasionadas por la pandemia. Sin embargo, remarcó que las secuelas a largo plazo de la crisis pandémica persisten y necesitan atención. La tasa de pobreza a nivel regional se ubicó en 27,5% en 2021, por encima del nivel prepandemia de 25,6%, mientras que las pérdidas de aprendizaje reducirían en 10% los ingresos futuros de millones de jóvenes en edad escolar. El Banco Mundial sugiere que los países lleven a cabo una serie de reformas estructurales y aprovechen las oportunidades que ofrece una economía mundial cada vez más verde. En el caso de Perú, el Banco Mundial estima un crecimiento de 3,4%, mayor al 3,2% señalado inicialmente.
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