Descontando la inflación, la tasa referencial del BCRP de julio es de 0,65% siendo la más alta desde febrero de 2018. Hace 12 meses el ente emisor inició el proceso de normalización de su política monetaria después de la laxitud requerida para afrontar la reactivación económica, pero recién en marzo último las tasas reales se tornaron positivas y desde esa fecha han ido aumentando progresivamente con la esperanza de contener las presiones inflacionarias.
No obstante estar en un nivel históricamente alto, el margen real aún resulta pequeño si se le compara con otros países de la región: en Brasil la tasa real es de 6,24%, en Chile llega a 2,50%, en Colombia a 2,20% y en México a 1,75%; por lo tanto, si la convergencia monetaria sigue siendo una norma para evitar pérdidas de competitividad por brechas cambiarias, es muy probable que el BCRP mantenga las subidas de su tasa en lo que resta del año, como mínimo hasta llegar al 7% nominal.
