Si los doce meses del año terminaran en junio, el gobierno acumularía un déficit de S/ 9.189 millones, equivalente al 1% del PBI. Hay un evidente descenso respecto del déficit de 2,5% del PBI de diciembre último, pero este se debe a una situación coyuntural que está punto de acabar: los elevados precios de los minerales de los últimos meses y su impacto en la regularización y el pago a cuenta del impuesto a la renta.
Los ingresos tributarios representaron el 17,7% del PBI, elevándose considerablemente frente a los porcentajes de 2019 y 2020 (14,8% y 13,3% del PBI, respectivamente), llevando los ingresos corrientes a 22,7%. En tanto, los gastos corrientes se ubicaron en 16,7% del PBI y los gastos de capital en 4,1% del PBI. Cabe destacar que la regla fiscal de 2022 determina que el déficit del gobierno no debe pasar del 3,7% anual. El gobierno debe ser muy prudente en los próximos meses pues el colchón de ingresos tributarios será cada vez menos generoso.