El producto interno bruto de Brasil aumentó 1,2% en el 2T22, superando las expectativas de un aumento de 0,9% y extendiendo el impulso expansivo a cuatro trimestres consecutivos. El crecimiento estuvo fuertemente respaldado por un avance del 4,8% en la formación bruta de capital fijo, recuperándose de la caída del 3% en el 1T22.
Al mismo tiempo, el consumo de los hogares aumentó 2,6%, prolongando el avance del 0,5% del 1T22 y marcando la mayor subida en un año. Por otro lado, el gasto público creció 0,9%, tras caer 0,1%. Mientras tanto, la demanda exterior neta contribuyó negativamente al PBI, con exportaciones que se contrajeron 2,5% e importaciones que aumentaron 7,6%.