Octubre de 2023 presenció una notable caída en el sentimiento del consumidor en EEUU, según el índice de la Universidad de Michigan, que se situó en 63, descendiendo desde el 68,1 registrado en septiembre y no cumpliendo con las proyecciones de mercado que anticipaban un valor de 67,2. Este descenso, que marca el nivel más bajo en cinco meses, refleja una creciente inquietud entre los consumidores respecto a las condiciones económicas actuales y futuras, y se ve exacerbado por las expectativas inflacionarias. La percepción de las condiciones económicas actuales y las expectativas también experimentaron caídas significativas, situándose en mínimos de cinco meses.
Las expectativas de inflación para el próximo año se incrementaron, pasando del 3,2% al 3,8%, la cifra más alta desde mayo de 2023, mientras que las perspectivas a cinco años también vieron un aumento, del 2,8% al 3%. Este aumento en las expectativas de inflación se ha convertido en una fuente significativa de preocupación para los consumidores, afectando sus evaluaciones sobre las finanzas personales y las condiciones comerciales esperadas. Las evaluaciones de las finanzas personales experimentaron una disminución de alrededor del 15%, y las condiciones comerciales esperadas para el próximo año se desplomaron aproximadamente un 19%, ambos movimientos impulsados principalmente por las crecientes inquietudes respecto a la inflación.
Joanne Hsu, directora de Encuestas de Consumidores, ha destacado que, a pesar de la actual desconfianza y el pesimismo en cuanto a las condiciones económicas a corto plazo, las expectativas a largo plazo de los consumidores han cambiado poco. Esto sugiere que los consumidores mantienen la creencia de que el actual deterioro de las condiciones económicas no será persistente. Este panorama plantea interrogantes sobre cómo las políticas económicas y fiscales podrían adaptarse para abordar estas preocupaciones y estabilizar la confianza del consumidor, siendo crucial para la recuperación económica y la estabilidad del mercado en un momento en que la economía estadounidense navega a través de desafíos multifacéticos.