En agosto de 2023, la tasa de inflación anual en Brasil aumentó al 4,61%, en comparación con el 3,99% del mes anterior. Aunque este incremento estuvo ligeramente por debajo de las estimaciones del mercado que apuntaban al 4,67%, se observa un alejamiento del mínimo registrado en junio, que fue del 3,16%, y del objetivo del banco central, que se sitúa en el 3,25%. Este aumento en la inflación sugiere un regreso de las presiones inflacionarias en la economía, lo que plantea interrogantes sobre si el Banco Central de Brasil (BCB) optará por continuar con su actual ciclo de reducción de tasas de interés, que se había iniciado en la última reunión.
Los precios al consumidor en Brasil se aceleraron significativamente en el sector del transporte, con un aumento del 4,1% en agosto, en comparación con el 0,25% registrado en julio. Esto se debió a la reintroducción de los impuestos a la gasolina, lo que provocó un incremento en los precios del combustible (1,05% frente a -10,66%). Asimismo, el índice de precios al consumidor (IPC) también aumentó más rápido en el caso de la vivienda y los servicios públicos, alcanzando un 5,32%, en comparación con el 4,37% anterior. Por otro lado, se observó una desaceleración en la inflación de alimentos y bebidas, que pasó del 2,2% al 1,08%.
En cuanto a la variación mensual, en agosto los precios al consumo en Brasil aumentaron un 0,23%. Estos datos indican que la inflación sigue siendo un tema de preocupación en la economía brasileña, y el Banco Central deberá tomar decisiones cuidadosas en relación con su política monetaria para garantizar la estabilidad económica en el país.