“Echemos abajo la estación del tren, demoler, demoler, demoler, demoler…” rezaba la letra de una famosa canción proto-punk del prominente grupo de rock peruano sesentero, Los Saicos, y que ahora retorna como consigna de un ex trotskista, ex jefe del INEI y ex asesor estadístico del defenestrado ex superintendente de banca y seguros, Daniel Schydlowsky.[1]
Emperifolladas por el trasfondo de una corbatita michi, las ametrallantes falacias y diatribas que suele lanzar a diestra y siniestra Farid Matuk en contra de sus enemigos políticos y sus sucesores en la jefatura del INEI, son motivo de atracción circense de los medios de comunicación ansiosos de camorra, tiraje y rating.
Para el ameno Matuk la población que habita en el Perú no serían los 31 millones 237 mil 385 reportados oficialmente por el INEI, sino los 34 millones 376 mil 500 personas con DNI según la Reniec, de manera que los Censos 2017 habrían tenido una omisión de 4 millones de peruanos, equivalentes al 15% de la población y no del 5,9% reconocida por el INEI, que está dentro de los estándares aceptables internacionalmente.
Dice que ir de puerta en puerta levantando información censal es innecesario, porque mucha información que se levanta así ya la tiene Reniec. No le importa que la abultada cifra de Reniec incluya a los cerca de 3 millones de peruanos que registraron su salida del país temporal o definitivamente y no retornaron durante más de un año, y a cerca de 1 millón de peruanos que viven en el extranjero y que Reniec sigue considerándolos como residentes en el Perú, dada su condición migratoria irregular.
Tampoco le importa que haya muchos peruanos con más de un DNI; muchos otros que, a pesar de ser fallecidos, siguen registrados con DNI, porque aún no han sido depurados del registro del Reniec; y una masa enorme que no cuenta con DNI (0,7% de la población según ENAPRES).
También pasa por alto que un censo también debe registrar a la población extranjera que vive en el Perú, la que obviamente no cuenta con DNI.
Si la población verdadera del Perú fueran los pregonados 34.376.500 DNIs emitidos por la Reniec, el crecimiento demográfico del Perú sería de 2%, lo que implicaría una ruptura absoluta con la tendencia declinante observada en cinco décadas. Algo absolutamente inverosímil.
A Matuk le falta poco para clamar por una insurrección de los pueblos del Perú para anular los Censos 2017, al advertir que si no se anulan las poblaciones de cada región, provincia y distrito se verán afectadas, deslizando subliminalmente una intención de quitarles recursos presupuestales.
Para meterle más leña a la hoguera, Matuk acusa al INEI de haber incluido preguntas en los Censos 2017 para favorecer a las universidades privadas. Se trata de preguntas referidas a si la persona está estudiando y en qué distrito; las que, junto a las referidas al lugar de trabajo, fueron integradas a la cédula por sugerencia de diversos expertos, para poder estudiar la movilidad urbana y planificar el desarrollo sostenible de las ciudades. Maliciosamente, Matuk afirma: «La pregunta es muy distinta a la que se seguía en los censos anteriores, en la cual solo se preguntaba sobre si asistía a una institución o no». También dice: «Si se desarrolla una política nacional no es necesario saber la ubicación del centro educativo».[2]
Pero Matuk, ¿es una autoridad en censos? A todas luces no. En su paso como jefe del INEI se llevó a cabo el peor censo poblacional de la historia del Perú, con resultados de escándalo, que fueron motivo de que fuera anulado.
El Censo de 2005 organizado por Matuk y que le costó decenas de millones al país, tuvo que volver a hacerse en 2007, al comprobarse que hubo una omisión de 1 millón 300 mil viviendas; 18,5% de las viviendas del país. En todas las regiones del país dicho censo reportó una población menor a la proyección esperada y hubo 41 provincias donde la población fue menor a la de 1993 y con tasas de viviendas desocupadas mayores a 30%. Fueron tan absurdos sus resultados que figuraban personas de 80 años como estudiantes de colegio, o nietos de más de 65 años.
Como un solo ejemplo patético de los muchos que se dieron, el alcalde de Lince de ese entonces, César Gonzales, se quejó de que el Censo 2005 reportaba 54 mil pobladores en su distrito, en tanto que en su propio registro constaban no menos de 80 mil habitantes. Incluso localidades como Mazamari y Pangoa no fueron censadas.
Todo esto, por supuesto, no es óbice para dejar de reconocer que en la ejecución de los Censos 2017 se presentaron dificultades logísticas que debieron ser previstas por el INEI. Felizmente ellas no invalidan la calidad de sus resultados finales, al superarse en la etapa de recuperación posterior al día del empadronamiento y gracias a que la metodología aplicada fue rigurosa; muy a distancia de la aplicada en el Censo 2005 que tuvo que anularse.
En lugar de formar parte de esta irracional campaña de demolición del INEI, contribuyamos con críticas constructivas a definir el nuevo rol y la correspondiente gobernanza de esta institución, dentro del marco de una nueva era signada por la transformación digital y la inteligencia artificial.
Al ingresar a la página web del célebre Matuk uno puede toparse a cada rato con frases tales como “Que en especial el BCR y el Congreso se desahueven…”. Sin llegar a ese nivel semántico, al menos habría que pedirle a la prensa quechuoslovaca que se despabile en temas de tanta transcendencia para el país.
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[1] “Entre los graves cuestionamientos que ocasionaron la abrupta salida de su jefe Daniel Schydlowsky (viajes, aumento de sueldo, suplantar identidad en el club Regatas), destaca el aumento de la esperanza de vida en las tablas de mortalidad para afiliados de las AFPs, de 84 a 87 años para los hombres y de 87 a 90 años para las mujeres, inclusive mayor que la esperanza de vida de las tablas de mortalidad que usan las AFPs chilenas (que siempre se habían usado en el Perú), que son de 86 años para hombres y 89 años para mujeres. Este aumento de la esperanza de vida se habría traducido en una reducción de la pensión mensual de los afiliados.” Gato Encerrado, 1° de julio de 2018.
[2] Página web de América Televisión. http://www.americatv.com.pe/noticias/actualidad/censo-2017-farid-matuk-esta-pregunta-favoreceria-universidades-n296603.
