Los futuros del cobre subieron por encima de los US$ 4,15 por libra, repuntando considerablemente desde el mínimo de casi dos meses de US$ 3,95 alcanzado el 27 de febrero, ya que los sólidos datos económicos de China apuntaban a una fuerte recuperación en el sector industrial del país. La última lectura del PMI reveló que la manufactura de China se expandió a su ritmo más rápido en varios años en febrero.
El suministro persistentemente ajustado también apoyó los precios del cobre, ya que las paradas de producción en las principales regiones de América del Sur y Central agravaron las preocupaciones sobre los bajos inventarios en los EEUU. Además de los aplazamientos mineros en Perú causados por inestabilidad política.