El ministro de Economía Luis Miguel Castilla y ex presidente Alan García Pérez presentaron ayer en paralelo un conjunto de medidas y propuestas, respectivamente, para que la economía acelere su ritmo de crecimiento. Lo destacable de ambos documentos es que los planteamientos son casi idénticos.
La mejor forma de hacer crecer la economía, según el Gobierno y la oposición, es generar más confianza en el empresariado, ampliar la inversión pública y los proyectos de asociación pública-privada, y disminuir los trámites burocráticos en las entidades ligadas al quehacer empresarial.
A su plan, García Pérez le añade objetivos, aunque estos suenan más a promesas de campaña electoral: Un crecimiento del PBI de 8% anual, crear dos millones de empleos en tres años y reducir la pobreza al 15%.
Como se indica al principio, lo destacable es la coincidencia en la receta, lo cual debería aprovecharse para avanzar cuanto antes en el camino trazado.
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