Marketing: al 2020 le sigue el 2025

No me voy a detener en comentar que el mundo ya no será el mismo después de la cuarentena, de esto ya estamos convencidos.

Donde me quiero detener un poco es en que la mayoría de los negocios se deben repensar para ser empresas “poscovidianas”, concibiendo su adaptación a la nueva dinámica del consumidor.

Los millennials y centennials somos muy sensibles y reactivos a la realidad de un mundo cosmopolita, donde nuestros hábitos de consumo se van ajustando semanal o diariamente. Por este motivo, las organizaciones deben adaptar a la misma velocidad sus estructuras, productos, estrategias comerciales y canales posventa para la nueva realidad global.

La aceleración del cambio de la disciplina del Marketing nos lleva a pensar que ya no podemos hacer nuestro forecast o budget basados en el pasado, que ahora más que nunca, no existe. Este nuevo hito en la humanidad viste de gala a la técnica del ‘scenario-based planning’, que consiste en concebir escenarios plausibles para prepararnos a una reacción inmediata y en cadena dentro de la organización.

¿Me sigues? A lo mejor, en este punto, un par de ejemplos nos desempañen el parabrisas para que veamos juntos el mismo panorama.

En éstas últimas semanas nos han invadido memes acerca de la dinámica explosiva en los hogares a propósito de la cuarentena, donde el típico brontosaurio de escritorio que antes llegaba de visita a su propia casa, se ve atrapado entre las paredes que antes sólo albergaban sus ronquidos.

Si. Se levanta sin alarma y de pronto ya no tiene que escapar antes que despierten sus angelitos para evitar peinar a la niña o cepillar los dientes al niño, o evadir el ósculo de buenos días a la doña. Ahora debe tener una cuarentena productiva, sea con tele trabajo o trabajando en su tele, a veces con noticias… a veces con Netflix.

Si a esta altura no hubo violencia intrafamiliar o pedido de divorcio, es porque los miembros del hogar ahora valoran más al núcleo de la sociedad y le están dando el lugar que sólo quedaba en las páginas del recuerdo.

Después del exabrupto mundial e inexplicable de la compra desmedida de papel higiénico para la casa, el consumo de productos para el desayuno se está disparando cada vez más. Y, ahora que extrañamos a Gastón, no lo vemos ni en pintura.

Claro, ahora hasta el más reputado Director de empresa ensaya sus mejores malabares con las ollas y sartenes, dándole un poco de chamba a su hemisferio derecho para plasmar algún plato criollo frente a sus comensales hogareños.

Por un momento pensé que mis vecinos sabían algo que yo no: ¿se venía la ley seca y teníamos que abastecernos de cerveza y todo tipo de alcohol? No, no fue así… sólo fue otro impulso descontrolado en el consumo bajo el mecanismo del borrego. De esta manera mantendrían religiosamente viva la costumbre de tener una semana santa lo menos santa posible.

Hoy ya no compramos pomposas camisas, corbatas importadas ni tacos o vestidos de corte europeo, sino pijamas más cómodos y que nos permitan sacar la basura sin sentirnos como Adán, Eva o Esteban.

Algunos números van delatando la culpa de la hibernación que estamos experimentando, como la demanda creciente de máquinas de gimnasio caseras o las suscripciones por Facebook Live con la instructora de aeróbicos del barrio para quemar, al menos, el jamón del desayuno.

Si hablamos de tecnología, sepamos que las laptops que quedan en los supermercados son sólo las de exhibición. Hay que conectarse vía Zoom o Skype, o imprimirle al niño un par de hojas que según la Directora, justifican ampliamente la pensión de marzo y abril.

Si hablamos de hobbies y ocio, comienzan a aparecer los instrumentos musicales en los catálogos del e-commerce del retail. Si esto no es suficiente, profundicemos en la Educación.

El consumo de Colegios, Universidades y Maestrías, no ha hecho más que desnudar la cruda y desaliñada realidad: los que nos juraban compromiso con la educación en realidad sólo nos estaban educando para cumplir con sus compromisos.

En salud, el consumo de vitaminas y alimentos que elevan las defensas siguen creciendo y no hay quién los pare.

Las inmobiliarias ya vocean: “múdate hoy y paga la inicial después”. Los vehículos comerciales son tal vez el bien menos comercial hoy en día.

En resumidas cuentas, la velocidad de adaptación a los cambios tecnológicos y la presencia en e-commerce será después de diciembre de 2020, prácticamente la misma que pensábamos tener entre manos en el 2025. Ya no hay tiempo, el cambio para ayer era tarde.

CEOs, Directores, Gerentes, reúnanse con sus especialistas en Marketing y armen su plan de acción inmediato para:

  • Tener una presencia digital ágil, dinámica, lista para cambiar y adaptarse
  • Desarrollar el canal e-commerce y una pasarela de pagos robusta
  • Des enamorarse de sus productos como los crearon, si es necesario rematar existencias para cambiar de rubro… ¡háganlo!
  • Diversificar sus unidades de negocio y líneas de producción
  • Investigar y analizar el escenario que tenemos al frente para reciclarse, sobrevivir y volver a la puja por la mayor porción de una nueva torta
  • Recurrir a herramientas promocionales para lograr liquidez tan pronto como sea posible

Piensen que el 2025 nos tocó el timbre, llegó y tiene ganas de conocernos.