La inflación de los precios al consumidor en la Zona Euro se revisó ligeramente al alza hasta el 8,6% interanual en enero de 2023, frente a una estimación preliminar del 8,5% y muy por encima del objetivo del Banco Central Europeo del 2,0%. Aun así, la tasa bajó al mínimo desde mayo pasado, debido a una desaceleración en la inflación de la energía (18,9% frente al 25,5% en diciembre).
Por otro lado, los precios aumentaron a un ritmo más rápido tanto para los bienes industriales no energéticos (6,7% frente al 6,4%) como para los alimentos, el alcohol y el tabaco (14,1% frente al 13,8%), mientras que la inflación de los servicios se mantuvo sin cambios en 4,4%. La tasa subyacente, que excluye artículos volátiles como la energía y los alimentos, subió a un récord de 5,3% en enero.